Foto: tomada del periódico Invasor
El Premio Memoria Viva, distinción que otorga el Instituto Cubano de Investigación Cultural Juan Marinello, recayó sobre la conservación del patrimonio haitiano en Ciego de Ávila, los carnavales tradicionales de Santiago de Cuba, familias que mantienen vivas las tradiciones de congas y comparsas en Las Tunas, parrandas como expresiones festivas que realzan los valores culturales cubanos, y destacadas figuras destacadas de la literatura nacional.
En esta convocatoria se evaluaron 68 expedientes procedentes de 10 provincias, compitiendo en las 4 categorías establecidas. De ellos, resultaron seleccionados 44.
Cabe resaltar la amplia participación de profesionales vinculados a casas de cultura, centros de investigación y promoción cultural local, así como a las oficinas del historiador en distintas provincias.
Más que un galardón, el Premio Memoria Viva representa un reconocimiento a la labor desinteresada de portadores culturales, quienes desde sus comunidades contribuyen decisivamente a preservar y difundir las manifestaciones tradicionales de la cultura popular cubana, tanto a nivel local como nacional.
Los trabajos presentados constituyen, además, una valiosa fuente de información actualizada sobre el registro de portadores, las expresiones de la cultura popular tradicional y su presencia en el territorio, así como el avance en los inventarios de patrimonio cultural.
Creado hace tres décadas, el premio es concedido anualmente por el Centro Juan Marinello a personas, familias, grupos y colectivos artísticos no profesionales con reconocida trayectoria, cuyas propuestas reflejen una labor destacada en la salvaguardia de estas manifestaciones culturales.