“La tecnología en el fútbol tiene una importancia significativa. Este deporte ha sido uno de los últimos en adoptar estas herramientas de manera extensa, aunque ya existen variaciones para mejorar el análisis de los partidos. A pesar de que conserva muchas de sus reglas originales, la ciencia aplicada influye en la forma en que interpretamos el juego”. Así lo aprecia nuestro entrevistado, Erik Campo, analista de la selección cubana de fútbol.
“Las estadísticas han evolucionado, y ahora contamos con nuevas métricas que nos permiten analizar no solo cuántos pases positivos o negativos se realizan, sino también otros aspectos más complejos del juego. El fútbol es un deporte muy dinámico e impredecible, lo que lo hace diferente al baloncesto, por ejemplo, donde las estadísticas son más directas y fáciles de cuantificar”.
Un ejemplo, fue el partido Real Madrid-Liverpool de la final de la Champions 2021-2022 donde el equipo que controló mejores números y registros desde las estadísticas no se coronó campeón de la edición.
Erik afirma que con el uso de GPS y análisis de partidos, se han podido crear mapas de calor que muestran donde los jugadores y equipos inciden más en un partido o varios. “Incluso actualmente, utilizan inteligencia artificial para analizar el rendimiento de los jugadores y ofrecer datos más precisos sobre sus acciones en el juego”.
Otro aspecto donde la tecnología en el fútbol ha impactado de manera crucial es en el arbitraje. Tecnologías como el Ojo de halcón o el Árbitro Asistente de Video (VAR, por sus siglas en inglés), son instrumentos que han llegado desde 2012 para intentar ser íntegros en la toma de decisiones.
“Siempre habrá un grado de subjetividad en los juicios, ya que al final los árbitros son personas. Aunque ahora sea un poco más justo, el debate persiste, especialmente en lo que respecta a las reglas más complicadas”.
“Las manos siguen siendo objeto de interpretación. La regla es la misma, pero hay múltiples incisos que pueden llevar a diferentes interpretaciones. Recientemente, en el pasado Clásico (Real Madrid vs Barcelona), hubo una jugada donde un jugador tocó el balón con la mano. Si lo hace deliberadamente, es penalti; pero al observar la secuencia completa, parece que intenta esconderla y no tiene intención de jugar el balón. Esto plantea una interpretación difícil”.
Tecnología en el fútbol de Cuba
El analista de la selección considera que se están utilizando herramientas comunes, bastante lejos de las usadas por otros equipos. “Todavía nos falta tecnología avanzada, como cámaras automáticas con software específico para análisis de juego. Y en cuanto a la preparación física, no se están utilizando GPS ni tecnologías modernas, sino test que te permiten identificar algunos detalles físicos”.
Erik Campo confirma que para un futuro, la Federación está trabajando para crear un departamento de análisis tecnológico que incluya este tipo de herramientas, aunque por ahora hay que ser pacientes y confiar en el proyecto.
El fútbol es un deporte de mucho análisis y cada instrumento que se tenga para utilizar es una ventaja. “Realizo análisis de todos los partidos que puedo ver del rival, pero no contamos con la tecnología adecuada para tener un seguimiento en tiempo real. Sería de mucha ayuda para el equipo tener un grupo de analistas que puedan ver el partido desde una laptop en la grada con las herramientas que hoy en día se utilizan para luego enviar lo que observen al cuerpo técnico del banquillo y así ayudar con la táctica del equipo”.

“El fútbol es táctico, y todo lo demás se sustenta en la parte física. La preparación física es fundamental para poder implementar la táctica que el entrenador desea. No todos los equipos se preparan de la misma manera físicamente; esto depende del despliegue táctico que necesita el entrenador. Por lo tanto, cada cual se prepara de acuerdo con el modelo de juego que elige. Cuando te enfrentas a otro equipo que también tiene su propia táctica, es casi como jugar al ajedrez: debes anticipar los movimientos y patrones del rival”.
Por otro lado, si bien es cierto que no todos los equipos de nuestra región cuentan con alta tecnología en el fútbol, los que la poseen, le dan hasta usos pocos éticos. Erik nos explica que durante un entrenamiento en una concentración fuera de la Isla, sintió un ruido raro en el cielo. A pesar de eso continuaron el entrenamiento y los ejercicios previos, pero cuando llegaron a la parte táctica vieron un dron espiando al equipo. No pudieron demandar al otro equipo porque no tenían formas de probarlo.
Solamente de fútbol
Para nadie es un secreto que existe cierta incertidumbre con el camino de la selección, sus jugadores y a lo que juega, sobre lo que el entrevistado opina:
“Las personas se molestan sobre cómo juega la selección, pero no siempre puede jugar al fútbol como el Barça. A veces tenemos que hacer planteamientos más discretos en cuanto al orden defensivo. Hay muchos conceptos que los jugadores no manejan, o los entrenadores tienen ayudarlos. Por ejemplo, en la defensa, a algunos jugadores no les gusta quedar mano a mano, y les piden a compañeros que abandonen su zona para ayudarlos y esto afecta al equipo”.

“Además, al enfrentar a equipos como Estados Unidos y México, es evidente que necesitamos un modelo de juego predeterminado. Sabemos que no siempre tendremos la posesión del balón, ya que estos son equipos con un mayor nivel de desarrollo, pero si jugamos contra un equipo con menos recursos, el enfoque cambia. En esos casos, debemos estar preparados para jugar de manera diferente y adaptarnos”.
Sobre el caso de los jugadores que son convocados explica que se seleccionan jugadores con experiencia en ligas importantes y se les explica lo que quieren de ellos, las funciones y como encajan en su sistema de juego, los guían para adaptarse al equipo. Hay jugadores como Onel Hernández que se implican más en ayudar al cuerpo técnico por los conocimientos adquiridos en ligas como la Premier League de Inglaterra.
Los aires que se transmite desde la Federación de Fútbol de Cuba son de mucho trabajo y confianza en el proyecto actual, con un mayor protagonismo para la tecnología en el fútbol.