Telegram, uno de los servicios de mensajería instantánea del momento, que había defendido a ultranza su gratuidad y no dependencia de la publicidad comercial, dio un golpe de timón el mes de junio pasado al lanzar un servicio de pago, denominado Telegram Premium.
Las razones argumentadas por la plataforma para tal medida son bastante lógicas: la posibilidad de costear con estos ingresos los desarrollos, cada vez más caros, que siguen estando disponibles gratuitamente para los 700 millones de usuarios del servicio, sean o no Premium.
También se explicó que, dado que la alternativa era hacer caja incluyendo publicidad, se optó por la opción de una modalidad de pago, que no quita a Telegram ni un ápice de control sobre sí mismo. Siempre ayudó el hecho de que muchos usuarios se pronunciaran a favor de que se diera este paso.
¿Qué trae Telegram Premium?
No son pocas sus adiciones exclusivas, pero la principal de ellas es que, para los que permanecen en la opción gratuita, todo se mantiene inalterable. Ni siquiera se enterarían de que la opción de pago existe, a no ser por su repercusión mediática, o porque algunas de las ventajas de la modalidad de pago “alcanzan” al servicio tradicional. Veamos:
Los suscriptores Premium, en primer lugar, tienen aumentados prácticamente todos los límites de la app. Pueden subir archivos de hasta 4GB (cuya descarga estará disponible para los “gratuitos”); seguir hasta 1000 canales; crear hasta 20 carpetas de chats con hasta 200 chats cada una; añadir una cuarta cuenta en cualquier app de Telegram; fijar 10 chats en la lista principal; y guardar hasta 10 stickers favoritos.
También tienen la posibilidad de escribir una biografía más larga e incluir un enlace en ella; contar con hasta 400 GIF favoritos y reservar hasta 20 enlaces públicos t.me. Por otro lado, las descargas son mucho más rápidas en el servicio de pago.
Otras prestaciones interesantes son la posibilidad de convertir a texto los mensajes de voz recibidos; y contar con la colección de stickers animados que constituye uno d ellos puntos altos del servicio en materia de exclusividad. La animación de estos stichers ocurre a pantalla completa y son visibles para todos los usuarios (incluye, claro está, los de modalidad gratuita).
Los usuarios de Premium también pueden usar otras formas de reaccionar a mensajes, con más de 10 nuevos paquetes de emojis.
Otra novedad bien recibida ha sido la posibilidad de contar con fotos de perfil animadas, a través de la inserción de videos o animaciones en bucle. Estos son visibles para todos en Telegram, sean Premium o no.
Los usuarios del servicio de pago también tienen a su disposición nuevas opciones en materia de chats, pues pueden organizar estos de una manera más personalizada, sin necesidad de que se le muestren cronológicamente.
Curiosamente, el lanzamiento de la opción Premium llegó acompañada de nuevas prestaciones para el servicio gratuito. Ahora está disponible la posibilidad de implementar solicitudes de unión a los grupos públicos, para que los administradores las evalúen y decidan sobre ellas. También los distintivos de verificación para figuras públicas y algunas mejoras en el diseño de los bots.
Estas actualizaciones para el servicio gratuito, y otras también ya implementadas, están saliendo gradualmente, así que, si no las tienes aún, actualiza tu app periódicamente.
¿Cómo instalar Telegram Premium?
Lo primero que debes saber es que no debes descargar nada, a no ser que tu app necesite ser actualizada. La suscripción al servicio de pago se hace desde la propia aplicación que ya tienes en tu teléfono. Ve a Ajustes y verás un apartado denominado Telegram Premium. Solo debes pulsarlo y seguir las instrucciones.
Pero (siempre hay un “pero”), seguir desde Cuba esa metodología es prácticamente imposible. Las variantes para tener este servicio desde nuestro país son muy escasas.
La primera es que un familiar o amigo te sufrague el gasto desde el exterior. La segunda, comprar desde Cuba con criptomonedasu otros métodos de pago una tarjeta VISA temporal y usarla para costear el servicio.
La tercera, acudir a algunos emprendimientos que ya existen en el país y que, vía MLC, pueden ayudarte con este esfuerzo.
Lo cierto es que en este momento, al menos para el usuario promedio cubano, la app no ofrece grandes ventajas que estimulen a obtenerla. Sin embargo, conocemos algunos que la están utilizando para apoyar la plataforma.
¿Pagarías por ella? Déjanos saber en los comentarios.
Claro, pero como bien dice ustedes desde aquí es casi imposible no es fácil osea nosotros los cubano