Los diputados cubanos, reunidos en el segundo periodo ordinario de sesiones de la X Legislatura aprobaron, este viernes, la Ley de Salud Pública. El proyecto refrendado había sido publicado en noviembre de 2023, para su análisis y consulta.
Al respecto, José Ángel Portal Miranda, titular de Salud Pública señaló que “se realizaron 64 en todo el país, así como cuatro videoconferencias, en colectivos de trabajos vinculados al sector de la salud, Brigadas Médicas en el exterior, Universidades de Ciencias Médicas, Sociedades científicas y otros.
“En total se recibieron 569 (propuestas, criterios o recomendaciones). De ellas se aceptaron 382 planteamientos, 135 en parte y 52 no fueron aceptados. Esto propició que se modificaran 98 artículos (47 por ciento)”.
Entre los principales aspectos discutidos por los diputados durante la discusión posterior a la lectura del dictamen de la Comisión de Salud y Deporte, estuvo el derecho a la salud sexual y reproductiva y a tener una muerte digna.
La diputada Taymí Martínez Naranjo hizo referencia a lo expresado en el texto legal sobre las determinaciones para el final la vida, en especial lo relativo a los cuidados paliativos y su importancia.
“Esta nueva Ley es perfectible porque esta hecha por seres humanos en una época y un contexto determinado, pero es maravilloso leer sobre novedades que refuerzan el concepto de salud y los derechos de nuestros pacientes, sus familias y trabajadores del sector”, apuntó.
Más allá de la determinación para el final de la vida, la diputada resaltó cómo se defiende en el documento “el derecho de las personas a una muerte digna, y a decidir sobre el proceso de su enfermedad.
“Estamos discutiendo una ley que pone en el centro el respeto hacia los seres humanos y su derecho más importante: poder decidir.
“No puede existir una posición paternalista o de ejercicio de poder sobre ellos. Ellos son los que deciden y son nuestro centro”, dijo Taymí Martínez.
“El concepto de salud va más allá de curar una enfermedad. Pasa por prevenir asesorar, aliviar, investigar, enseñar, sanar, acompañar y también amar.
“No es una novedad ni estamos descubriendo el agua fría. Creemos que tener una ley de salud garantiza estos derechos, nos impulsa en el trabajo hacia una mejor organización de los servicios y coherencia en la implementación de la norma.
“Es una ley justa y necesaria. Nos toca después de aprobarla, implementarla para garantizar los derechos de todos”, puntualizó la diputada.
Por su parte, Mariela Castro, directora de Centro Nacional de Educación Sexual (CENESEX), dijo que el derecho a la salud pública no ha dejado de ser un tema fundamental, “no solo es reconocido, sino que también es un derecho conquistado y desarrollado a lo largo del proceso revolucionario cubano.
“Por lo tanto, es crucial contar con un anteproyecto de Ley de Salud Pública (ya ley) que consolide este derecho y articule un sistema que garantice la atención de calidad, educativa e inclusiva para toda la ciudadanía, sin ningún tipo de discriminación.
La diputada destacó que en el Título III, Capítulo 2, se incluye una sección dedicada exclusivamente a la salud sexual y reproductiva.
“Una medida sumamente novedosa y acogida con beneplácito, ya que responde a dos reclamos de nuestra población.
“Es importante destacar que esta ley de salud pública es la primera en reconocer, de manera independiente, derechos sexuales y reproductivos”.
En este sentido, subrayó que esta sección tercera contiene todos los aspectos relacionados con la sexualidad.
“Eso implica reconocer el derecho a la ciudadanía de su salud sexual y reproductiva, como una visión científica que va más allá de la reproducción o del embarazo, y engloba todo el proceso que abarca la actividad sexual y la reproducción en sí misma”.
Asimismo, indicó que la promoción de lugares donde prime un ambiente inclusivo, libre de estigmas, discriminaciones y violencia es de suma importancia para el disfrute de esos derechos sexuales.
Otro aspecto que está presente en la ley es la atención a la gestante (como estaba en la Ley 41), así como el acceso a los servicios de planificación familiar.
“También se reconocen las técnicas de reproducción asistida, en concordancia con lo establecido en el Código de las familias”, manifestó Mariela Castro.