Foto: Revista Viajeros
Con un taller liderado por el viceministro primero de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (CITMA), José Fidel Santana Núñez, y representantes de diversas entidades y ministerios relacionados con la Tarea Vida, dio inicio en La Habana el proceso de elaboración de la nueva contribución nacionalmente determinada (CND) de Cuba, en correspondencia a los compromisos internacionales adquiridos en el Acuerdo de París para el enfrentamiento al cambio climático.
Las Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional son un compromiso de la comunidad internacional para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, acorde con la Convención Marco de Naciones Unidas sobre Cambio Climático (CMNUCC), que demanda acelerar e intensificar las acciones e inversiones necesarias para un futuro sostenible con bajas emisiones de carbono.
Según explicó el Dr. C. Wenceslao Carrera Doral, especialista de Cubaenergía y coordinador técnico de la elaboración de la CND en Cuba, el Acuerdo de París, adoptado en la COP21 el 12 de diciembre de 2015, establece que las partes deberán comunicar cada cinco años una contribución determinada a nivel nacional, las cuales deben tener un carácter progresivo, mediante un aumento paulatino de la ambición.
El experto comentó que durante el año 2020 el país llevó a cabo un proceso de actualización de la Contribución Nacionalmente Determinada (CND), la cual incluye cinco contribuciones de mitigación y 13 de adaptación.
Esas contribuciones de mitigación, tenían sus metas fundamentales en el establecimiento de acciones y políticas en los sectores de la energía (tanto en la generación con fuentes renovables (FRE), como en la eficiencia energética), el transporte, el manejo de bosques y el sector ganadero (en específico el porcino).

Entre los indicadores que se midieron en esa actualización está la fracción de electricidad generada con fuentes renovables de energía con respecto a la generación bruta, la introducción de unidades más eficientes (calentadores solares, luminarias led, bombas solares, cocinas de inducción), el consumo de combustibles fósiles en vehículos terresteres o las áreas cubiertas de bosques.
Siguiendo el curso indicado por el Acuerdo de París, la nueva CND deberá ser comunicada a la Convención Marco de Naciones Unidas sobre Cambio Climático (CMNUCC) antes del 10 de febrero de 2025. En esta, dijo Wenceslao las metas de acciones y políticas deben pasar a un paquete más amplio.
Durante el taller se coordinaron las bases preliminares para la realización de ese proceso, los sectores priorizados, el cronograma de elaboración de la propuesta y su aprobación por el gobierno.
Al taller también asistió Odalis Goicochea, directora general de Medio Ambiente del CITMA, Manuel Gil, de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desasrrollo y Fernando Hiraldo, representante residente del Programa de Naciones Unidas en Cuba, quien declaró su disposición a continuar acompañando al país en estos procesos.