Bancarización, el vocablo que alude a la ‘acción y efecto de bancarizar’, esto es, ‘hacer que alguien o algo, como un grupo social o un país, desarrolle o resuelva las actividades económicas a través de la banca’, es la palabra del año 2023 para Buen Idioma.
Esta es la cuarta ocasión en que elegimos nuestra palabra del año después de seleccionar nasbouco, vacuna y supertanquero en 2020, 2021 y 2022, respectivamente.
Y por qué «bancarización» es la palabra del año 2023 para Buen Idioma. La ganadora de este año, una voz propia del ámbito de la economía, saltó a los medios de comunicación de nuestro país y, desde luego, al día a día de los cubanos. Entre los beneficios de la bancarización está la posibilidad de realizar, por ejemplo, «todos los pagos de servicios, productos, y demás operaciones comerciales y financieras mediante el uso de instrumentos de pago y canales electrónicos preferiblemente, en lugar de utilizar dinero en efectivo», como ha puntualizado en varias ocasiones el Banco Central de Cuba.
Este vocablo conquistó los principales titulares, al punto de que, en nuestra propia revista dedicamos varios artículos a este tema para ofrecer análisis sobre dicho proceso, pero desde un punto de vista tecnológico. Destaca el titulado “Tú bancarizas, ellos bancarizan, ¿nosotros…?”, de Ernesto Guerra Valdés, publicado el 11 de agosto de 2023:
Bancarización. Si fuéramos a medir el puso de lo más comentado en redes sociales digitales respecto a Cuba, probablemente esa fuera la plaabra del momento. Economistas, todólogos, cuentapropistas y mipymeros… han desbordado sus perfiles con opiniones de todo tipo.
Bancarización, ¿un vocablo nuevo?
Aunque este término se popularizó aquí a partir del pasado agosto, precisamente, cuando el Banco Central de Cuba anunció la publicación, en la Gaceta Oficial, de la resolución 111/2023, lo cierto es que no es una voz nacida en 2023 ni tampoco una voz exclusiva de nuestro país. Se trata de un neologismo correctamente formado, incorporado al Diccionario de la lengua española, de las academias, desde el año 2001.
Bancarización se emplea en disímiles países del ámbito hispánico, tal y como se puede corroborrar en el Corpus del Español del Siglo XXI, de la Real Academia Española. En esa gigantesca base de datos, se documenta ampliamente el uso de dicha palabra, desde inicios de este milenio, en países como España, México y Argentina. De hecho, se recogen algunos ejemplos de uso en Cuba, sobre todo en textos académicos publicados en el año 2014.
La palabra de los lectores
Antes de dar a conocer la ganadora, Buen Idioma publicó un listado de 12 palabras —representativas de este año que concluye— relacionadas con diversos ámbitos, como la economía, la política y la migración. Entre ellas destacan mipyme, protémpore, resiliencia y parol, preferida esta última por nuestros lectores.
En Buen Idioma explicamos que parol, mejor que el anglicismo parole, podría ser una adptación válida de esta voz inglesa que se emplea con el sentido de ‘tipo especial de admisión temporal a los Estados Unidos’, pues refleja la pronunciación corriente de esa palabra, a saber, [paról].
El Diccionario de americanismos, de las academias de la lengua, solo define esta voz inglesa como ‘libertad bajo palabra’, sentido con el que se emplea en el español de los Estados Unidos.
Conviene recordar que, de preferir el anglicismo, lo apropiado es que se resalte en cursiva o, si no se dispone de este tipo de letras, entre comillas, tratamiento que reciben otras palabras extranjeras sin adaptar, como se indica en la Ortografía de la lengua española.
Buen Idioma en JT: tres años (y un poco más) de aprendizajes y logros
El 16 de septiembre de 2020 iniciamos la aventura de Buen Idioma en esta revista. Apenas cinco meses habían pasado del nacimiento del proyecto y ya JT nos abría sus puertas. Agradecemos a todo el colectivo y, en especial, a su directora, Iramis Alonso Porro, por depositar, durante estos más de tres años, toda su confianza en nosotros y cedernos cada miércoles un apartado en las redes para hablar sobre la lengua española y su relación con la ciencia, la tecnología y el medioambiente.
Junto a JT Buen Idioma creció. Para regocijo nuestro también conquistó disímiles reconocimientos, entre ellos y por tres años consecutivos, el más importante que otorga el gremio de la prensa en Cuba, el del Concurso Nacional de Periodismo 26 de Julio. Destacan, además, los siguientes:
- – Mención (octubre de 2021) en la categoría hipermedia por la columna semanal Buen Idioma en el Concurso de Periodismo Científico Gilberto Caballero Almeida, del CITMA y la UPEC.
- – Premio de Innovación (noviembre de 2021), otorgado a nuestra revista, entre otras razones, «por el uso de varios proyectos nuevos como el Buen Idioma y de una innovación que se sostiene en la diversificación de estrategias, sobre todo, de servicio público», como dictaminó el jurado.
Si bien estos galardones fueron un aliciente para seguir adelante, el reconocimiento mayor ha sido —sin asomo de falso agradecimiento— la compañía y acogida que, por parte de los lectores, tuvo esta columna semanal desde su creación hasta ahora. Buen Idioma hoy no se despide de JT, solo dice un «hasta siempre», con el compromiso de volver —al menos, esporádicamente, o cuando la importancia de determinado tema amerite una reflexión lingüística— para hablar sobre nuestro “buen idioma”, ese del que cada día debemos estar más orgullosos.